El Pleno del Consell ha aprobado este viernes la declaración de emergencia de los trabajos y actuaciones necesarias para controlar el brote de botulismo en las zonas húmedas protegidas del sur de Alicante.

 

Retirada de cadáveres y traslado de animales afectados

 

La Conselleria de Transición Ecológica declaró el pasado 1 de julio la emergencia de los trabajos de retirada de cadáveres y traslado de animales afectados por la enfermedad, detectada en el Parque Natural del Hondo, al centro de recuperación de fauna silvestre de Santa Faz.

La inmediatez de las actuaciones de control, por un importe de 150.688 euros, ha permitido minimizar la afección de la infección, provocada por la anoxia consecuencia de las altas temperaturas, en el humedal, así como evitar su propagación a otras zonas húmedas adyacentes como el Clot de Galvany, els Carrissars d'Elx, las Salinas de Santa Pola o las Lagunas de la Mata-Torrevieja.


Poblaciones de aves acuáticas de gran valor

 

La enfermedad se detectó en el mes de junio en el Parque Natural del Hondo, una zona que alberga poblaciones de aves acuáticas de gran valor para su conservación por razones de biodiversidad. Este es un punto de nidificación fundamental a nivel europeo para la anátida, una especie declarada en peligro crítico a nivel nacional.

La entrada de aguas residuales favorece la aparición de brotes de botulismo en los humedales. Es una toxina neuroparalizante producida por la bacteria Clostridium botulinum, que inhibe la respuesta muscular del organismo, la incapacidad para volar en las aves, sumergirse, caminar o mantener el cuello erguido, suelen morir por ahogamiento.

La bacteria puede permanecer durante años en estado vegetativo en las lagunas, se desarrolla durante los meses más cálidos y sobretodo cuando hay gran escases de agua, prolifera sobre los animales muertos y el envenenamiento masivo de aves se produce por la ingestión de larvas de los cadáveres.

 

Para los seres humanos

 

La toxina botulínica es una de las sustancias más tóxicas conocidas, de manera que es posible que con tan solo probar el alimento contaminado, se produzcan graves intoxicaciones que pueden conducir incluso a la muerte.

El Clostridium botulinum es una bacteria anaerobia cuyas esporas son capaces de sobrevivir en los alimentos contaminados que han sido sometidos a procesos de elaboración incorrectos y/o almacenamientos inadecuados.