El 17,4% de las especies de briófitas de Baleares, que son plantas terrestres no vasculares, se encuentra en situación de riesgo, según asegura un libro publicado a través de la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio.

El Libro rojo de las briófitas amenazadas de las Illes Balears, que se puede descargar gratuitamente en la página web del Govern, revisa el estado de conservación de todas las especies briófitas del archipiélago e identifica aquellas plantas que están amenazadas.

La obra, que identifica hasta 350 especies, explica que las especies briófitas, que generalmente son poco visibles y que tienen un papel "fundamental" en el funcionamiento de los ecosistemas, se pueden dividir en tres categorías, que son hepáticas, musgos y antoceras.

Este libro, que ha sido realizado por el botánico mallorquín Llorenç Sáez indica que la mayoría de estas especies se encuentran en ambientes húmedos, principalmente en la Serra de Tramuntana, donde se encuentra el 70% de estos ejemplares.

En total se han identificado 60 especies de briófitas amenazadas en Baleares, principalmente en las zonas montañosas, pero también se pueden encontrar especies en situación de riesgo en terrenos secos descubiertos y en zonas costeras, ha indicado el Govern en una nota de prensa.

De estas 60 especies, que representan el 17,4% de la brioflora del archipiélago, 15 corresponden a hepáticas y 45 a musgos. Del total de especies, 19 se encuentran en peligro crítico, 17 están en peligro y otras 24 son vulnerables.

Mallorca cuenta con 277 especies amenazadas

 

Según los datos presentados, el 90,1% de las briófitas de Baleares se encuentran en Mallorca, aunque Menorca e Ibiza también tienen extensiones parecidas, a pesar de que la diversidad en especies es mucho más alta en la primera de estas islas.

Según detalla el libro, este factor es debido a una notable diversidad litológica, pues en Menorca los terrenos silicios ocupan extensiones importantes, y por la existencia de una buena representación de diferentes zonas higrófilas, mucho más escasas en Ibiza.

En concreto, Mallorca cuenta con 277 especies amenazadas, que ascienden hasta 286 si se incluyen las subespecies y las variedades, que supone el 80,5% del total de las especies de briófitas del archipiélago.

La zona del archipiélago con mayor concentración de especies de briófitas amenazadas se encuentra en el macizo del Puig Major, con un total de 25 organismos, que representan el 41,6% del total de estas especies amenazadas.

Asimismo, la Serra de Tramuntana cuenta con otros espacios poblados con 11 especies amenazadas y tres exclusivas, que se reparten entre el macizo de Massanella, el torrente del Gorg Blau, la zona de Tossals y Cúber-El Ofre.

Finalmente, el Ejecutivo ha destacado que Baleares cuenta también con otras seis especies amenazadas en la zona occidental del municipio de Ferreries, en Menorca, donde afloran los terrenos silicios y las balsas temporales, que hacen posible la existencia de briofíticos singulares.