El consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, ha presentado este jueves el proyecto europeo Life Ribermine con el que el Gobierno de Castilla-La Mancha va a revitalizar en el Alto Tajo las zonas que en su día fueron afectadas por la antigua mina de caolín de Santa Engracia ubicada en la localidad de Peñalén.

Escudero ha destacado que se trata de un nuevo ejemplo del compromiso que ha adquirido el Ejecutivo para recuperar zonas degradas por la actividad minera mediante una transición energética justa.

El objetivo es el de "reactivar las comarcas que en su día dependieron socioeconómicamente de la extracción de minerales como el carbón o el caolín, como es el caso que hoy nos ocupa, impulsando actuaciones para recuperar sus ecosistemas originales, a la vez que contribuimos a la lucha contra el cambio climático".

El proyecto Life Ribermine, cofinanciado por la Unión Europea, y coordinado por la Dirección General de Transición Energética de la Consejería de Desarrollo Sostenible, cuenta con un presupuesto de 2.941.280 de euros, y en el participan junto al Gobierno de Castilla-La Mancha, entre otros, la empresa pública medioambiental Geacam, el Geoparque de Molina de Aragón, la Confederación Hidrográfica del Tajo, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, empresas y asociaciones mineras españolas y portuguesas, asociaciones ecologistas, así como diferentes universidades, tanto nacionales como internacionales.

Varios son los objetivos que se persiguen con el Life Ribermine, según ha recalcado el consejero. Entre ellos, la recuperación de los paisajes naturales del entorno de la mina Santa Engracia; la restauración de 27,4 hectáreas del Alto Tajo para mejorar el sistema fluvial de su cuenca; la también mejorara de la calidad de su agua en 21,5 km de tramos de río; y la reproducción del hábitat físico, químico y biológico de la zona afectada.

"Tenemos la firme intención de que puedan ser replicadas estas actuaciones en otras minas en España y la Unión Europea, además de concienciar de la existencia de soluciones que eliminan el impacto ambiental vinculado a la actividad minera en las masas de agua dulce, especialmente en los espacios que forman parte de la Red Natura 2000", ha afirmado el consejero.

Escudero ha añadido que, con este Life, que se exportará a una zona de paso del Tajo en Portugal, se va a proyectar internacionalmente la comarca del Alto Tajo, "reconstruyendo sus ecosistemas afectados a la vez que fomentamos el empleo local contribuyendo al desarrollo socio-económico de la comarca".

Un proyecto referente mundial

 

El responsable de Desarrollo Sostenible también ha querido subrayar que este proyecto "es pionero en Europa por las metodologías y técnicas utilizadas de forma conjunta, también es una referencia mundial sobre los trabajos de restauración de minas, ya que es el más completo que se conoce hasta la fecha". Una circunstancia, según ha enfatizado, "que refleja la importancia de este proyecto que lidera Castilla-La Mancha".

Respecto a los detalles, durante el primer año se va a proceder a los movimientos de tierra en las escombreras exteriores de la antigua explotación de Santa Engracia; el segundo año se emprenderá la remodelación del hueco principal; y para el tercer año, se realizarán actuaciones en la escombrera de Hoya Grande, y en el denominado 'frente del cementerio'.

En el mes de julio se inició el movimiento de tierras en las dos escombreras principales. Está previsto que finalice en octubre, para a continuación, iniciar las labores de cubrimiento y revegetación de las escombreras citadas para ayudar a su consolidación.

279 explotaciones mineras en la región

 

La industria extractiva regional tiene 279 explotaciones mineras activas, de las cuales sólo una de ellas es subterránea. Emplea a 1.479 trabajadores directos, y produce algo más de 18,3 millones de toneladas fundamentalmente de áridos, como arcillas, yesos y otros productos minerales. Su facturación asciende a 195 millones de euros.

Estos números, proyectados a los datos de la minería nacional, señalan que Castilla-La Mancha tiene el 10,21% de las explotaciones activas de España, un 5,02% del empleo minero, y un 3,8% de la facturación minera total, ocupando entre el sexto y el séptimo puesto en el ranking de la minería nacional por comunidades autónomas.

Este sector abastece de materias primas a industrias importantes de la región de diversos ámbitos, como el del cemento, hormigón preparado, yesos y cales, energía, cerámica estructural, entre otros. Supone cerca del 35% del PIB industrial regional.