Los datos que revela hoy Equalia sobre la presencia masiva de bacterias productoras de betalactamasas de espectro extendido (BLEE) en los productos de pollo analizados en Alemania demuestran la necesidad de reducir el uso de antibióticos en las granjas, no solo para mejorar el bienestar animal, sino también para evitar la aparición de dichas bacterias resistentes a los antibióticos.

La mayoría de las bacterias (75%) eran Escherichia coli, y en todas las muestras se detectó la enzima ESBL, que hace que las bacterias sean inmunes a varios antibióticos comunes. El laboratorio también encontró Enterococcus (25% de las muestras), Campylobacter (18% de las muestras) y Salmonella (1 muestra). Con estos resultados, Equalia lamenta que las bacterias resistentes a los antibióticos se están extendiendo y la eficacia de los antibióticos está disminuyendo, lo que provoca un aumento de su uso y favorece aún más el crecimiento de bacterias resistentes.

Desarrollar nuevos antibióticos de reserva es caro y lleva mucho tiempo, por lo que la organización considera urgente reducir el uso de antibióticos en la ganadería en toda Europa. Por ejemplo, el ganado alemán recibe unas 670 toneladas de antibióticos al año, con una media de 88 miligramos de antibióticos por kilo de carne. 

En España, la situación en cuanto al uso de antibióticos en ganadería sería similar, lo que hace que Equalia recuerde la importancia de reducir el uso de antibióticos en nuestro ganado, mejorando el bienestar animal gracias al Compromiso Europeo del Pollo. Esta iniciativa europea recoge mejoras concretas desarrolladas por un equipo científico experto en bienestar animal de la Real Sociedad para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (RSPCA, por sus siglas en inglés).

Entre los aspectos más importantes, destaca un cambio a razas de pollos de crecimiento más lento (no broiler) para reducir su sufrimiento diario, un aumento del espacio asignado a cada ave, una mejor iluminación y calidad del aire, así como un sacrificio más humano, a través de un aturdimiento controlado.

 

Carne de pollo de Lidl está muy contaminada con bacterias peligrosas

 

Según el análisis de laboratorio publicado hoy, la carne de pollo de Lidl está muy contaminada con bacterias peligrosas, incluidos gérmenes multirresistentes y otros patógenos. El uso excesivo de antibióticos en la cría de pollos contribuye a la propagación de bacterias peligrosas y a la aparición de resistencias a los antibióticos.

Además, estas bacterias pueden afectar a todas las personas, no sólo a clientes de Lidl, ya que los gérmenes resistentes pueden propagarse al medio ambiente, a través de las aguas residuales o los sistemas de ventilación. Cocinar bien la carne puede eliminar las bacterias, pero las superficies y los utensilios contaminados también pueden propagar gérmenes, por lo que es esencial una buena higiene en la cocina. Otra investigación de Germanwatch también demostró que la carne de pollo ecológica tenía menos gérmenes peligrosos que la convencional.

Esta nueva investigación ofrece una perspectiva complementaria al escándalo de los pollos de Lidl denunciado por la coalición de ONG europeas lideradas por Equalia desde España. Cabe recordar en este sentido que Equalia ha publicado, hasta el momento, reportajes de investigación de presunto maltrato animal en macrogranjas relacionadas con Lidl en varios países europeos: EspañaItaliaAlemania y Austria.

En el caso de las granjas españolas, gracias al reportaje de investigación publicado por Equalia, se logró que las explotaciones de Sevilla y de Tarragona perdieran el sello Welfair de bienestar animal. En concreto, en la granja situada en el municipio sevillano de Villamanrique de la Condesa -que cuenta con casi 100.000 aves por ciclo- los operarios realizaban la descarga de pollitos en la explotación arrojándolos al suelo bruscamente.

Por su parte, en la granja catalana, situada en el municipio tarraconense de Roquetas, se observaba un contenedor roto que contenía tanto pollos muertos en estado de descomposición como larvas.