WWF presenta su nuevo proyecto Centinelas del veneno, en el que seis aves equipadas con dispositivos GPS liderarán la lucha contra el uso ilegal del veneno en la que ya participan cientos de aves por todo el país.

Algunos cazadores y ganaderos utilizan venenos ilegales para acabar con animales que se alimentan de las especies que cazan (conejo, perdiz, etc.) o que pueden suponer una amenaza para su ganado (ovejas, cabras, etc). Pero el veneno no es selectivo y es ilegal. Su uso provoca muertes indiscriminadas de animales, sobre todo, aves en peligro de extinción

 

El veneno no es selectivo y es ilegal

 

La iniciativa ha contado con la participación de técnicos de GREFA, SEPRONA y el Servicio Cinológico de la Guardia Civil, de la Estrategia Andaluza Contra el Veneno y de WWF, que han resaltado la utilidad de estos dispositivos para identificar los casos, recabar pruebas y poder identificar a los culpables de estos delitos. El veneno ha acabado con la vida de más de 200.000 animales en los últimos 30 años.

Escobalón, Jara, Montejo, Yelmo, Timón y Salvia serán los 6 centinelas elegidos para liderar y representar la importante lucha contra la presencia ilegal de veneno en el campo. Con esta campaña, WWF busca dar visibilidad a estas aves que recorren zonas de máxima incidencia de veneno en España.

La web de Centinelas www.centinelasdelveneno.es permitirá que cualquier persona pueda seguir las aventuras de estos y otros centinelas del veneno, así como estar informados de las noticias más relevantes sobre este tema.

 

9.700 de estos delitos contra la fauna

 

Según el último informe sobre la situación del veneno en España de 2020 de WWF y SEO/BirdLife, solo entre los años 1992 y 2017, se han cometido más de 9.700 de estos delitos contra la fauna, con un resultado de más de 21.260 animales muertos por consumo de cebos envenenados. Según WWF, esta elevada cifra, no obstante, es muy inferior a la real, que podría llegar a más de 200.000 animales, puesto que se estima que sólo se detectaron entre el 10 y el 15% de los casos.

En palabras de Gema Rodríguez, responsable del programa de especies de WWF, "se ha avanzado mucho en la detección, investigación y persecución del veneno en España, y concretamente en regiones como Andalucía, por lo que somos un referente a nivel europeo".

"Sin embargo, el veneno todavía es un gran problema de conservación, como muestra el reciente envenenamiento masivo de aves ocurrido en Salamanca, y por eso es fundamental incrementar los recursos para la detección y persecución legal de este delito. La presencia de miles de centinelas del veneno surcando nuestros cielos es sin duda una de las mejores herramientas que disponemos", apostilla.