El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, ha advertido de que si no se logra un acuerdo entre los países sobre las normas para implantar y poner en marcha el Acuerdo del Clima de París, alcanzado en 2015, sería "no solo inmoral" sino también "suicida".

Guterres, que regresó el martes a la XXIV Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Cambio Climático (COP24) que se inauguró el pasado 3 de diciembre, para participar en el tramo de negociación final, ha lanzado un aviso a los delegados de más de 130 países reunidos en la ciudad polaca de Katowice de que tienen pocao tiempo para mostrar voluntad política y alcanzar compromisos "difíciles" y que requieren "sacrificios".

"No llegar a un acuerdo aquí en Katowice enviaría un mensaje desastroso a aquellos que están dispuestos a cambiar a una economía verde", manifestó Guterres. "Perder esta oportunidad comprometería nuestra última mejor oportunidad de detener el cambio climático que está fuera de control. No solo sería inmoral, sino suicida", concluyó.

El Acuerdo del Clima de Paris fue adoptado en diciembre de 2015 por 190 países pero tres años después las distintas delegaciones siguen negociando sobre la forma de poner en marcha el pacto. En Katowice, Estados Unidos, Rusia, Arabia Saudí y Kuwait, grandes productores de petróleo, son los países que están obstaculizando principalmente que se logren progresos respecto al compromiso alcanzado en París, y evitaron que la cumbre asumiera las duras recomendaciones del último informe de los científicos del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático de la ONU.

En ese sentido, el ministro de Medio Ambiente de Brasil, Edson Duarte, curiosamente otro país cuyo nuevo presidente Jair Bolsonaro niega el cambio colimático y se plantea abandonar París, ha denunciado que el tiempo corre y que mientras los países están perdiendo el tiempo debatiendo textos y exigiendo su implantación el planeta se está deteriorando. "Las especies se están extinguiendo. Los hábitats están desapareciendo. Las emisiones se acumulan", ha lamentado.

El objetivo de París fijó como límite 2 grados centígrados el incremento de la temperatura global al final de siglo respecto a los niveles preindustriales, y añadió la posibilidad de elevar la ambición hasta 1,5 grados centígrados.

Facilitadores para un acuerdo

El martes la Presidencia de la Cumbre designó a un grupo de países como "facilitadores" para desatascar este acuerdo y fijar unas reglas claras de implantación.

La ministra española para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, y su homólogo el ministro de Turismo de Sudáfrica, Dereck Andre Hanekom, están entre los "facilitadores" en materia de transparencia para alcanzar un pacto sobre las reglas del Acuerdo de París durante lo que resta de Cumbre en Katowice.

Así, los ministros de España y Sudáfrica se dedicarán durante el resto de la Cumbre, que terminará este fin de semana, a tratar de desatascar o facilitar las negociaciones y así lograr un acuerdo multilateral sobre los aspectos de transparencia que se deberán establecer para aplicar el Acuerdo contra el cambio climático, que cerca de 200 países firmaron en 2015 en París (Francia).

El conocido como 'libro de reglas' del Acuerdo de París es un tema fundamental para poder alcanzar un pacto durante esta Cumbre que se celebra en Polonia y la designación de España supone en el lenguaje de las negociaciones internacionales un reconocimiento del papel tanto del Gobierno como de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.