Las organizaciones ecologistas Amigos de la Tierra, WWF y Greenpeace han coincidido en señalar que las medidas que contemplan tanto el decreto ley que incluye un plan de ahorro energético como el decreto de medidas urgentes que actualiza la legislación básica en materia de incendios forestales, aprobados este jueves en el Congreso, son "necesarias" aunque matizan que hacen falta estrategias "más profundas" porque "no inciden en las causas reales de la crisis climática, ni contribuyen a la independencia energética de los combustibles fósiles".

 

Medidas "necesarias" pero "insuficientes"

 

Desde Amigos de la Tierra, la responsable de Justicia climática y energía, Cristina Alonso, ha recalcado a Europa Press que, en materia de ahorro energético, las medidas aprobadas son "necesarias" pero "insuficientes" porque la sociedad se encuentra "ante una emergencia", por lo que se necesitan medidas que estén "a la altura de la situación".

"¿Cómo nos podemos tomar en serio estas medidas cuándo los objetivos estatales de reducción de emisiones tan solo son de un 23%  para 2030?", ha cuestionado.

Al respecto, ha pedido apostar por "medidas valientes" y ha añadido que este tipo de propuestas vayan acompañadas de "cambios sustanciales" que apuesten por la energía comunitaria. También ha defendido que se facilite a la población los cauces necesarios para poder establecer comunidades energéticas renovables y descentralizar el sistema energético y las fuentes de energía.

"La rehabilitación de viviendas y otros edificios es otra de las vertientes en las que debemos incidir, prestando especial atención a la situación de precariedad de las personas más vulnerables afectadas por la pobreza energética", ha reafirmado.

 

Mejora la capacidad de respuesta a los incendios forestales

 

En el caso de WWF, el coordinador de conservación, Luis Suárez, ha señalado que su organización valora "muy positivamente" el decreto de medidas urgentes que actualiza la legislación básica en materia de incendios forestales y mejora la capacidad de respuesta, tanto de prevención como de extinción durante todo el año.

Suárez ha puesto el foco especialmente en la prevención de los incendios forestales, ya que se exige a las comunidades autónomas contar con planes anuales de prevención, vigilancia y extinción, que deberán estar aprobados antes del 31 de octubre, entre otras cuestiones.

"Significa que se va a poder incidir más en ese trabajo de prevención que se debe desarrollar a lo largo de todo el año. Otro elemento clave es también que se va a desarrollar una herramienta de zonificación de lo que son las zonas de alto riesgo, algo que venimos también reclamando desde hace mucho tiempo, puesto que no es lo mismo cada zona y cada territorio. Cada territorio tiene características singulares y, por lo tanto, se debe abordar desde una perspectiva ligeramente distinta", ha destacado.

Suárez también ha destacado que el texto implica mejoras en las acciones de coordinación, lo que permitirá un mejor trabajo entre comunidades autónomas y la administración central.

No obstante, ha insistido en que se debe realizar "una estrategia más profunda de gestión integral de Ciencias Forestales que sea capaz de poner en marcha todas aquellas actividades del mundo rural que puedan contribuir a crear un paisaje más resistente a los incendios y resiliente al cambio climático".

 

No hay un gran acuerdo en política forestal

 

Desde Greenpeace, el portavoz de la campaña de Bosques de Greenpeace España, Miguel Ángel Soto, ha reivindicado a Europa Press la importancia de abordar una gestión forestal por parte de las comunidades autónomas, al tiempo que ha lamentado que la clase política "no está a la altura" y no hay "un gran acuerdo en política forestal.

"Hay que convivir con el fuego pero centrarse en que los incendios no sean tan catastróficos. Necesitamos paisajes que ardan de otra forma, que tengan otro comportamiento ante el fuego. Son necesarios los paisajes mosaico que rompan la continuidad del combustible", ha señalado, antes de añadir que otro de los problemas que existe en España es la falta de recursos económicos en algunos puntos de la geografía. "Los incendios se apagan cuando se asignan los presupuestos", ha sentenciado.