Los Estados miembros de la Unión Europea (UE) cuentan con los medios necesarios para adoptar las herramientas que harían sostenible su política pesquera pero no los aplican aún, según revela el informe Cómo puede la UE hacer la transición a una pesca de bajo impacto ambiental, baja en carbono y socialmente justa publicado por la Campaña Nuestro Pescado y Pescadores de Bajo Impacto de Europa.

 

Cuotas de pesca

 

Según informan las organizaciones Our Fish, Low Impact Fishers of Europe (LIFE) y Ecologistas en Acción, el informe contempla que la activación del artículo 17 de la Política Pesquera Común (PPC) y la asignación de cuotas de pesca que se basen en criterios transparentes de objetivos de carácter ambiental, social y económico, lograrían una transición a una flota pesquera de "bajo impacto y baja en carbono".

El informe presenta criterios y procedimientos que si la Comisión Europea y los Estados miembros de la UE cumplieran podrían alcanzar el objetivo.

 

Unos pocos grandes actores

 

El secretario ejecutivo de LIFE, Brian O'Riordan, asegura que "los sistemas utilizados por los Estados miembros para asignar sus cuotas pesqueras han conducido a la concentración de las posibilidades de pesca en manos de unos pocos grandes actores, en detrimento de los pescadores a pequeña escala de bajo impacto y del medio ambiente marino".

 

"Premia" a los que más pescan

 

Por ello, señala que el actual sistema "no es adecuado" porque "premia" a los que más pescan, que apunta que se necesita un sistema que de recompensas a los que pescan "de forma más sostenible y proporcionan los mayores beneficios a la sociedad".

Igualmente, la responsable de pesca de Ecologistas en Acción, Cecilia del Castillo, explica que España no es una excepción y que de acuerdo con el informe el país considera criterios ambientales y sociales en el reparto de las cuotas para algunas pesquerías.

No obstante, denuncia que "estos son ejemplos escasos y el porcentaje de la cuota que se reparte en beneficio de la pesca más socialmente justa y menos dañina con el medio marino es mínimo".

 

Dejar atrás el modelo de pesca extractivista

 

Ante la nueva ley de pesca que elabora el Gobierno, cuenta que ahora España "tiene la oportunidad de dejar atrás el modelo de pesca extractivista y ajeno a las crisis de biodiversidad y climática en las que nos encontramos, y apostar por una pesca más sostenible", concluye.

Por último, la directora de Our Fish, Rebecca Hubbard, sostiene que para frenar la crisis climática y de la biodiversidad se debe garantizar la salud de los océanos, que alega que "la Política Pesquera Común de la UE tiene los elementos necesarios para llevar a cabo la transición hacia una pesca que minimice los impactos sobre las especies protegidas y los ecosistemas marinos, aumente la captura de carbono y maximice los beneficios sociales para las comunidades costeras".

Para ello, subraya que, en su opinión es preciso acelerar la transformación con el impulso de buenas prácticas y un acceso prioritario a la cuota de pescado. Así, concluye que con la actual crisis climática la Comisión Europea "puede y debe urgentemente ayudar a acelerar esta transición, mientras que los Estados miembros de la UE, como el Gobierno de España, deben demostrar su voluntad política y su compromiso de realizar el trabajo necesario para asegurar un futuro saludable para nuestras poblaciones de peces y comunidades costeras".