La Fiscalía Superior de Asturias ha trasladado a la Coordinadora Ecoloxista de Asturias que se han abierto diligencias de investigación por el envenenamiento de varios animales en algunos concejos del centro de Asturias en base a la denuncia que ellos han interpuesto tras tener conocimiento de que en los últimos meses han aparecido varios buitres leonados y perros muertos en diferentes puntos de los concejos de Teverga, Quirós, Proaza, Yernes y Tameza y Mieres.

Consideran los Ecologistas que dichas muertes parecen estar relacionadas con uno o varios episodios de envenenamiento en la zona.

Esta práctica delictiva, desde hace décadas, afecta a especies protegidas como el oso pardo cantábrico o el águila real y tiene efectos negativos muy graves en la cadena trófica

"Nos consta que en la zona que abarca los concejos mencionados aparecen, de manera recurrente y desde hace décadas, aves y otros animales salvajes envenenados sin que nadie haya sido condenado ni perseguido por este delito", indican.

 

Matar a los animales que resultan molestos

 

Recuerda el colectivo, que esta práctica delictiva afecta a especies protegidas como el oso pardo cantábrico o el águila real y tiene efectos negativos muy graves en la cadena trófica.

La Coordinadora Ecoloxista considera que la administración del Principado de Asturias no pone el empeño necesario en perseguir delitos tan graves como es el uso de venenos para matar a los animales que resultan molestos.

En los años 60 y 70 del siglo pasado el uso de cebos envenenados fue una práctica usual entre ganaderos y cazadores

Ha recordado que "el uso de venenos es una de las amenazas más graves para la fauna salvaje en España. En los años 60 y 70 del siglo pasado el uso de cebos envenenados fue una práctica usual entre ganaderos y cazadores, práctica que poco a poco fue decayendo debido al nuevo ordenamiento jurídico y gracias a las labores de divulgación sobre las perversas consecuencias del uso de venenos en la naturaleza. Sin embargo, en los últimos años se ha detectado un grave y muy preocupante repunte en su uso, volviendo a los alarmantes niveles de hace décadas, cuando era una práctica permitida".

"La utilización de venenos implica la eliminación indiscriminada de la fauna en general, ya que es un método no selectivo que afecta a especies predadoras de todo tipo, carroñeras, omnívoras e incluso a animales domésticos. Además de ser una práctica cruel, que conduce a una muerte lenta y dolorosa por sofocación y parálisis muscular del animal, altera negativamente la organización de los ecosistemas. Por otro lado, el uso del veneno puede tener repercusiones negativas en los seres humanos, ya que puede entrar a formar parte de la cadena alimenticia".