La rehabilitación de los edificios en las ciudades está provocando una desaparición paulatina de los lugares donde las aves pueden nidificar, según alerta SEO/BirdLife.

 

SOS Nidos

 

Así lo expone la ONG en la campaña SOS Nidos que puso en marcha en 2020 para proteger los lugares de cría de las aves ante las denuncias que recibe de ciudadanos relacionadas con la destrucción de los nidos de aves y muchas de ellas provocadas por la rehabilitación de los edificios.

Golondrinas, aviones, vencejos y murciélagos se han adaptado a convivir con los seres humanos en entornos urbanos. Cavidades, grietas, huecos en cubiertas y fachadas ofrecen espacios donde descansar, criar o hibernar a numerosas especies, todas protegidas y muchas de ellas amenazadas.

 

Rehabilitación de más de un millón de edificios

 

Pero la falta de lugares donde anidar podría ir a más ante la previsión de que en los próximos años se espera la rehabilitación de más de un millón de edificios en España por lo que SEO/BirdLife llama a administraciones públicas, arquitectos, constructoras y propietarios para que tengan en cuenta la fauna urbana que los utiliza como lugares de cría o refugio.

 

Portal de denuncia ambiental

 

Además, anima a los ciudadanos a denunciar cualquier agresión a nidos o lugares de cría de las aves a través de su portal de denuncia ambiental y recuerda que eliminar o destruir nidos es una práctica prohibida por la legislación española, europea e internacional. A través de este portal se han recibido numerosas denuncias por destrucción o expolio de nidos que suponen el 14 por ciento de todas las tramitadas.

En este contexto, la ONG ha elaborado una lista de recomendaciones para la protección de la biodiversidad que utiliza los edificios como lugar de refugio o nidificación.

Asimismo, junto con la Asociación Española para la Conservación y el Estudio de los Murciélagos (SECEMU), reclama al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda urbana y a las administraciones autonómicas que las nuevas obras de rehabilitación financiadas por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia cumplan el principio de no causar daño significativo (DNSH), sobre la fauna que habita en los edificios.