Las nuevas normas de la Unión Europea para la reutilización segura de aguas residuales depuradas en el riego agrícola entró en vigor este lunes con requisitos mínimos comunes de calidad del agua para facilitar la adopción de esta práctica.

 

Más fuentes de agua segura para el riego

 

Las nuevas normas ayudarán a los agricultores a acceder a más fuentes de agua segura para el riego y contribuirán a preservar los recursos hídricos que necesitan los ecosistemas acuáticos y terrestres.

Las normas se aplicarán a partir de ahora en todos los Estados miembro, salvo en aquellos que hayan decidido acogerse a una cláusula de exclusión voluntaria. Así, entre los países de aplicación de la normativa se encuentran: España, Portugal, Francia, Italia, Grecia, Bélgica, Países Bajos, Suecia, Estonia, Hungría y Rumanía.

El agua es un recurso precioso que escasea cada vez más. Al igual que reutilizamos cada vez más otros materiales y materias primas escasas, las aguas residuales urbanas pueden tratarse con éxito con las tecnologías disponibles

VIRGINIJUS SINKEVICIUS, comisario europeo de Mediom Ambiente

"El agua es un recurso precioso que escasea cada vez más. Al igual que reutilizamos cada vez más otros materiales y materias primas escasas, las aguas residuales urbanas pueden tratarse con éxito con las tecnologías disponibles", ha señalado el comisario europeo de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, Virginijus Sinkevicius.

Aunque la reutilización del agua ya se aplica con éxito en algunos Estados miembro y en otras partes del mundo, en la UE sólo se recupera y reutiliza el 2,4% del total de las aguas residuales urbanas depuradas. Este porcentaje varía mucho de un país a otro, ya que algunos reutilizan hasta el 89% de las aguas residuales tratadas, mientras que la mayoría utiliza muy poco o nada en absoluto.

En la UE sólo se recupera y reutiliza el 2,4% del total de las aguas residuales urbanas depuradas

En el contexto del Pacto Verde Europeo, tanto el Plan de Acción para la Economía Circular como la nueva Estrategia de Adaptación al Cambio Climático de la UE hacen referencia a un uso más amplio de las aguas residuales tratadas como forma de reforzar la capacidad de la UE para responder a las crecientes presiones sobre los recursos hídricos.

También está en consonancia con la Agenda de Acción para el Agua adoptada en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Agua de 2023, que se centra especialmente en el acceso a agua suficiente de buena calidad y en la adaptación al cambio climático.