El Parlament ha dado su visto bueno a seguir tramitando una iniciativa de la CUP que propone presentar ante el Congreso una proposición de ley que modifique el Código Penal para incorporar el crimen de ecocidio como delito contra la comunidad internacional, y también plantea que el Tribunal Penal Internacional (TPI) lo contemple.

 

Propuesta de la CUP

 

Es una propuesta de la CUP para presentar a la Mesa del Congreso la Proposición de ley de modificación de la Ley del Estado 10/1995 del Código Penal, y en el pleno de este miércoles supera el primer trámite al no presentarse enmiendas a la totalidad: así, el texto se abordará en comisión parlamentaria antes de volver al pleno para votarse.

 

Ecocidio es todo acto ilegal o derivado de un defecto grave de previsión o precaución cometido por estados, empresas públicas o privadas, o individuos y grupos de individuos sabiendo que es altamente probable que cause un daño grave, extenso y duradero al medio ambiente

 

El portavoz adjunto de la CUP, Dani Cornellà, ha trasladado la propuesta este miércoles ante la Cámara y la presencia de entidades impulsoras, alegando que la propuesta "señala responsabilidad penal directa" a los autores de crímenes de ecocidio.

En su propuesta, la CUP define como ecocidio "todo acto ilegal o derivado de un defecto grave de previsión o precaución cometido por estados, empresas públicas o privadas, o individuos y grupos de individuos sabiendo que es altamente probable que cause un daño grave, extenso y duradero al ambiente" y prevé para las situaciones más graves la pena de prisión permanente revisable.

Cornellà ha explicado que adoptar este crimen es "reconocer que dañar el medio ambiente es un delito flagrante" contra las presentes y futuras generaciones.

 

Postura de los Grupos

 

La socialista Sílvia Paneque ha defendido introducir el crimen de ecocidio en el TPI y hacerlo con lealtad con otras administraciones estatales y europeas, y ha valorado que existan instituciones globales encargadas de "defender los valores compartidos por los seres humanos".

Desde Vox, Sergio Macián ha recordado que, en el Congreso, la Comisión de Transición Ecológica ya aprobó una proposición no de ley de las mismas características el año pasado, ha achacado que la propuesta no concreta las penas a imponer y ha añadido que su grupo votará en contra en trámite parlamentario.

Joan García (Cs) ha mostrado su apoyo a reconocer el ecocidio como crimen, pero no a la propuesta de la CUP y ha recomendado seguir ejemplos como el francés, cuyo "código penal ya recoge este delito".

El diputado no adscrito Daniel Serrano ha recalcado que el ordenamiento jurídico español ya contempla conductas contra el medio ambiente, y que el hecho de que el Parlament prevea enviar la propuesta al Congreso implica que asume que no puede aprobar cualquier medida: "Es un avance si empiezan a asumir la realidad jurídica de este país".

El republicano Eugeni Villalbí ha replicado a Serrano que la iniciativa trata de agotar todas las vías estatutarias de las que dispone el Parlament, y ha augurado que la cuestión del ecocidio será un "debate global que como humanidad se deberá tener y abordar" en lo que cree que será un proceso largo y complejo.

Desde Junts, Salvador Vergés ha destacado que si Cataluña fuera un Estado podría tramitar esta iniciativa sin llevarla al Congreso: "Lo que nos toca es pedir permiso y que esté de acuerdo el Estado represor español, que desde Junts tenemos totalmente atado de pies y manos", ha dicho en referencia a la negociación sobre el Gobierno tras las elecciones generales.

Yolanda López (Comuns) ha añadido sobre estas negociaciones: "El negacionismo climático de Vox y PP han sido derrotados en las urnas. Ahora no es el momento de quedarse igual, sino de avanzar y, si quieren que propuestas como estas salgan adelante, señores de Junts y de ERC, no le den a Abascal una segunda oportunidad".