Extinction Rebelion (XR) ha defendido la necesidad de acciones de "desobediencia colectiva" en el contexto "inédito de la inacción climática criminal de los gobiernos" que realizan tanto esta organización como Futuro Vegetal en todo el mundo y que han sido clasificadas en el epígrafe de Terrorimo Nacional en la Memoria Anual de la Fiscalía General del Estado: "Terroristas son quienes destruyen en Planeta, no quienes lo defienden".

El informe anual, presentado la semana pasada con motivo del inicio del curso judicial, sitúa a estas organizaciones ecologistas dentro del epígrafe de actividad terrorista. Sin embargo, estas organizaciones consideran que la "desobediencia colectiva cumple con un deber de justa resistencia y de legítima defensa de la vida rigurosamente fundadas en derecho".

Además recuerdan que el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos reconoce la desobediencia civil como una "forma legítima de acción y protesta".

Antonio Guterres, secretario general de la ONU, dijo "a veces se describe a los activistas climáticos como radicales peligrosos.

Pero los radicales verdaderamente peligrosos son los países que están aumentando la producción de combustibles fósiles"

 

 

Toda la vida en el planeta está directamente amenazada

 

La organización justifica así sus acciones en el marco de la desobediencia civil dado que la "supervivencia de toda la vida en el planeta está directamente amenazada".

En su reacción, recuerdan las palabras pronunciadas en 2022 por el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien dijo "a veces se describe a los activistas climáticos como radicales peligrosos. Pero los radicales verdaderamente peligrosos son los países que están aumentando la producción de combustibles fósiles".