Ecologistas en Acción se ha posicionado en contra del espectáculo Naturaleza encendida del Real Jardín Botánico porque supone gran "contaminación lumínica y derroche energético", entre otras razones.

 

Banalizan el sentido y función del Jardín Botánico

 

El pasado 17 de noviembre se inauguró en el Jardín Botánico de Madrid una nueva edición del espectáculo de luces Naturaleza encendida. A juicio de Ecologistas En Acción, se trata de un espectáculo "más propio de un parque de atracciones que de un lugar dedicado, teóricamente", a la conservación y educación ambiental.

"Este tipo de actos no solo banalizan peligrosamente el sentido y función del Jardín Botánico. Se trata de un proyecto únicamente destinado a obtener beneficios económicos pero que, en ningún momento, se ha valorado el impacto sobre la flora y fauna", han manifestado.

 

Tendencia creciente de mercantilización

 

El Jardín Botánico es un recinto histórico que, desde 1939, pertenece al CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas). A juicio de los ecologistas, desde esa fecha se ha visto envuelto en una "tendencia creciente de mercantilización", donde se han organizado diversos eventos masivos, de entre los que destaca la nueva edición del espectáculo de luces navideñas.

En esta ocasión la temática de la Naturaleza encendida son los hongos, algo que, en principio, guardaría relación con las actividades de un Jardín Botánico. Sin embargo, Ecologistas en Acción manifiesta que, pese a la temática, "el evento choca frontalmente con la misión del Jardín de ser un centro científico y de divulgación".

"Buena prueba de ello es la publicidad para la venta de entradas, que reza así: 'Una aventura excepcional al aire libre que comienza cuando el sol se pone. Una experiencia llena de luz que te invita a descubrir un espacio de ensueño donde sentirte bajo el encanto de la naturaleza. Un fantástico paseo nocturno en compañía de tus niños, amigos o pareja. Diviértete, aprende, posa para tus mejores fotos y ¡compártelas!", señalan.

Ecologistas en Acción reprocha que la intención principal que se esconde detrás de la Naturaleza encendida "no es científica ni educativa, sino meramente de recaudación económica".

 

Contaminación lumínica

 

El Jardín Botánico está dotado de grandes masas arbóreas y arbustivas que, gracias a su diversidad, atraen a un gran número de aves urbanas que lo utilizan como refugio y dormidero. Destacan especies como la paloma zurita (Columba oenas), el picogordo (Coccothraustes coccothraustes) y el zorzal común (Turdus philomelos), como típicos residentes invernales. Además, decenas de especies de mariposas como la Vanessa atalanta, la Argynnis pandora o la Issoria lathonia encuentran el Jardín como un lugar idóneo en el que refugiarse en estado de larvario.

"Este sosegado refugio de biodiversidad, profundamente valioso para la calidad ambiental de la ciudad madrileña, se ve alterado e invadido por los efectos del espectáculo navideño. Ello se debe a que las molestias y daños significativos a la fauna y flora son inevitables cuando se trata de una instalación de cientos de metros de cableado, un elevado número de luces en los árboles, y una masificación del recinto entre las 18:00 y 24:00 durante dos meses", apunta la organización ecologista en un comunicado.

 

30% de nuestros vertebrados y 60% de los invertebrados son nocturnos

 

Además, recalca la importancia de la investigación de Alicia Pelegrina López, doctora en Ciencias Ambientales por la Universidad de Granada. En su último libro analiza las causas y consecuencias de la polición luminica. Y es que hay que tener en cuenta que el 30% de nuestros vertebrados y el 60% de los invertebrados son nocturnos.

Añaden que existen numerosos estudios en los que se demuestra que la contaminación acústica y lumínica afectan al sueño, la regulación hormonal y la capacidad de orientación de las aves. Además, desde 2019 numerosos trabajos científicos señalan que la luz artificial también afecta negativamente a los insectos, siendo uno de los factores clave en el descenso de su población.

La vida vegetal tampoco es indiferente a la contaminación lumínica. Recientes estudios demuestran que la exposición continuada a luz artificial provoca en las plantas alteraciones en sus redes tróficas, floración y crecimiento, continúan los denunciantes.

 

Derroche energético

 

Ecologistas en Acción también señala que a pesar de que la empresa promotora del evento lo anuncie como Evento Sostenible Alineado con los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible), se trata de un espectáculo de luces "innecesario y ecológicamente inaceptable".

"El gasto energético que supone encender miles de luces de colores durante largos periodos de tiempo no puede ser calificado como sostenible, especialmente en un contexto de emergencia climática y donde los alumbrados navideños empiezan a ser cuestionados cada vez más socialmente", apuntan.

 

 Lavado Verde o Greenwashing

 

El patrocinador del evento 'Naturaleza Encendida' es la multinacional Hyundai, el cuarto fabricante de automóviles a nivel mundial. La organización ecologista critica que la industria automovilística es responsable de emitir cada año aproximadamente el 10% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero (GEI).

La asociación ecologista declara que "se trata de una maniobra de lavado de cara verde, conocido popularmente con la expresión inglesa greenwashing". "No es la primera vez que en las instalaciones del Jardín se llevan a cabo exposiciones interactivas patrocinadas por grandes multinacionales", lamentan.

La misma consideración de 'lavado verde' merecen para los eventos Articus y El Manantial de los Sueños. El primero, tendrá lugar esta Navidad en La Casa de Campo y el segundo en el Real Jardín Botánico Alfonso XIII de Ciudad Universitaria.

 

Sostenavilidad, dista mucho de una verdadera sostenibilidad

 

Recalcan que haber inventado la expresión sostenavilidad, que presuntamente haría referencia a una Navidad sostenible "no es más que otra maniobra de lavado verde". "Organizar talleres de adornos navideños reciclados, elegir como temática el uso responsable del agua, recrear el ártico --con el derroche energético que conlleva-- o incluir en una carta a Papá Noel nuestros mejores deseos de sostenibilidad, es insuficiente y dista mucho de una verdadera sostenibilidad. Sobre todo, cuando en ningún momento, se ha valorado el impacto que estos eventos tendrían sobre el patrimonio, la movilidad, la flora y fauna de la Casa de Campo y del Jardín Botánico de la Universidad Complutense", denuncian.

Ecologistas en Acción concluye que instituciones científicas y públicas del prestigio del Real Jardín Botánico-CSIC de Madrid y la Casa de Campo (BIC ambos), así como la Universidad Complutense de Madrid no deberían estar contribuyendo al lavado de imagen de empresas de dudosa ética y cuya actividad contribuye de forma tan importante a agravar la crisis climática.