La organización Greenpeace considera que es fundamental que la ciudadanía apoye iniciativas rurales sostenibles, por lo que ha demandado a las administraciones que tomen medidas que faciliten el acceso a la sociedad mediante canales cortos de comercialización y garantizando la compra directa a las personas productoras.

Esta reivindicación, señala la organización, está enmarcada en la campaña #HablaRural que pretende recuperar las actividades que previenen el cambio climático y la pérdida de biodiversidad.

Por ello, ante las compras navideñas, Greenpeace destaca que sin cambios radicales en el modelo de sociedad no se podrá frenar los impactos de la emergencia climática, por lo que sostiene que "el producto local, ecológico y de temporada es bueno para la salud, para la economía y para el planeta".

"Pedimos un cambio de patrón de consumo de la ciudadanía. El mundo rural, nuestros pueblos y su actividad productiva sostenible son esenciales para nuestra supervivencia. Apoyar los productos rurales sostenibles se traduce en la fijación de población, el fortalecimiento del medio rural y en la mitigación de la emergencia climática y la pérdida de biodiversidad", ha reconocido el portavoz de la campaña, Julio Barea.

En este sentido, Greenpeace plantea cinco demandas para fomentar el consumo de productos rurales sostenibles, como campañas de concienciación orientadas al consumo responsable de productos rurales, incluir de manera obligatoria en los pliegos de contratación empresas rurales de proximidad, incentivar los canales cortos de comercialización, así como promover una fuente única, pública, gratuita y de libre acceso que permita conocer a los proveedores, tiendas, etcétera y, por último, reducir la brecha digital en el medio rural.

Por último, añaden que, desde el comienzo de la pandemia mundial, las compras por Internet han aumentado y han superado los datos más altos de la temporada de Navidad mientras que, por el contrario, las compras en el comercio minorista han bajado un 14% en marzo y un 31% en abril.