El día Internacional de Cero Desechos es una iniciativa global que busca concienciar a la población sobre la necesidad de reducir al mínimo la generación de residuos y promover una economía circular que aproveche los recursos de forma eficiente.

Sumario

 

El Día Internacional de Cero Desechos es una jornada de sensibilización que se celebra el 30 de marzo desde 2023, establecida por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 14 de diciembre de 2022. Este día tiene como objetivo fomentar el consumo y la producción sostenibles, la transición hacia una economía circular y la concienciación sobre la contribución de las iniciativas de cero desechos a la sostenibilidad.

Esta celebración apoya las iniciativas de cero residuos y ayuda a cumplir los objetivos y metas de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, en concreto el ODS 11 y ODS 12. Estos objetivos abordan todas las formas de residuos o desechos, como la pérdida y el desperdicio de alimentos, la extracción de recursos naturales y los desechos de equipos eléctricos y electrónicos.

 

El mundo debe superar la era de los desechos y convertirlos en recursos

 

Según un nuevo informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), sólo una drástica reducción de la generación de residuos garantizará un futuro habitable y asequible. El informe Perspectiva Mundial de la Gestión de Residuos 2024 (GWMO 2024) proporciona los datos actualizados más sustanciales sobre la generación mundial de residuos y el coste de los residuos y su gestión desde 2018.

Según este estudio, la generación de residuos sólidos urbanos se espera que se eleve de 2.300 millones de toneladas en 2023 a una impactante cifra de 3.800 millones de toneladas para el año 2050. Este incremento vertiginoso no solo conlleva un coste directo de gestión de residuos de 252.000 millones de dólares en 2020, sino que también desencadena costes ocultos relacionados con la contaminación, la insalubridad y el cambio climático, elevando la factura a 361.000 millones de dólares. Si no se toman medidas urgentes, esta cantidad podría casi duplicarse para 2050, alcanzando los 640.300 millones de dólares anuales.

La adopción de medidas de prevención y gestión de residuos podría limitar los costes netos anuales para 2050 a 270.200 millones de dólares. Sin embargo, el verdadero potencial radica en un modelo de economía circular, donde la generación de residuos y el crecimiento económico se desvinculen, generando un beneficio neto total de 108.500 millones de dólares al año.

 

62 millones de toneladas de desechos electrónicos a año

 

Uno de los problemas más crecientes en la gestión de residuos tiene que ver con los electrónicos. El reciente Informe Mundial de residuos electrónicos  alerta de que la generación de residuos crece a un ritmo cinco veces superior a su reciclaje. En 2022, la humanidad produjo un asombroso total de 62 millones de toneladas de residuos electrónicos, con una proyección de alcanzar los 82 millones de toneladas para 2030, representando un aumento del 33%.

Sin embargo, solo el 22,3% de estos residuos fueron reciclados adecuadamente, lo que significa que aproximadamente 62 millones de toneladas de recursos naturales recuperables quedaron sin aprovechar, aumentando los riesgos de contaminación. Entre los desafíos que contribuyen a esta brecha se encuentran el progreso tecnológico, el mayor consumo, las limitadas opciones de reparación, la obsolescencia programada y la inadecuada infraestructura de gestión de residuos electrónicos.

El informe destaca que, si los países lograran elevar las tasas de recogida y reciclaje al 60% para 2030, los beneficios superarían los costes en más de 38.000 millones de dólares, además de minimizar los riesgos para la salud humana. La dependencia global de unos pocos países en lo que respecta a los elementos de tierras raras también se destaca como una preocupación, especialmente dada su importancia para las tecnologías futuras como la generación de energías renovables y la movilidad eléctrica.

 

Los desechos afectan negativamente al clima, la biodiversidad y la salud pública

 

Los desechos tienen un impacto negativo tanto en el clima como en la biodiversidad, ya que emiten gases de efecto invernadero, contaminan el suelo, el agua y el aire, y afectan a la fauna y la flora. La gestión inadecuada de residuos sólidos urbanos representa una amenaza creciente y global que deja a su paso una estela de devastación ambiental y repercusiones socioeconómicas.

Desde la contaminación de los océanos hasta la proliferación de enfermedades, los efectos de una gestión deficiente de los desechos son inquietantes y omnipresentes. Montañas de basura desbordadas en vertederos saturados emiten gases de efecto invernadero, contribuyendo al calentamiento global y a la degradación del aire que respiramos

Asimismo, los desechos representan un riesgo para la salud pública, ya que pueden transmitir enfermedades, generar malos olores y favorecer la proliferación de plagas y vectores. Además, las comunidades marginadas a menudo enfrentan el peso desproporcionado de la contaminación y la enfermedad debido a la proximidad de vertederos y la falta de acceso a servicios básicos de eliminación de residuos. Por otra parte, los desechos suponen un desperdicio de recursos valiosos que podrían ser reutilizados o aprovechados para generar energía o materiales.

La gestión ineficiente de los desechos no solo es una crisis ambiental, sino también una crisis de justicia social que exige una acción urgente y coordinada a nivel global.

 

Cómo contribuir a celebrar este día

 

Para celebrar este día, se organizan diversas actividades a nivel local, nacional e internacional, como talleres, charlas, exposiciones, campañas de limpieza, concursos, ferias o mercadillos. Estas actividades buscan difundir las buenas prácticas de cero desechos, tales como la prevención, la reutilización, el reciclaje, el compostaje, la reparación, el uso de envases retornables o la compra a granel. Además, se pretende crear una red de colaboración entre los diferentes agentes implicados en la gestión de residuos, como las autoridades públicas, las empresas, las organizaciones sociales y la ciudadanía.

El Día Internacional de Cero Desechos es una oportunidad para reflexionar sobre nuestro impacto ambiental y adoptar hábitos de consumo más responsables y conscientes.