La organización conservacionista WWF ha denunciado la falta de control que existe en las 32 granjas de visones que hay en España, lo que puede conllevar que no se detecten posibles brotes y/o mutaciones del COVID-19 como ha ocurrido en Dinamarca, además ha reiterado su petición de cerrar de forma "inmediata" y "definitiva" las granjas de estos ejemplares.

En este sentido, la organización menciona al Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC), que ha reconocido recientemente el alto riesgo que suponen estas granjas como reservorio de coronavirus, aunque aclara que es necesario investigar más para valorar el alcance e impacto de los nuevos descubrimiento en Dinamarca.

En este contexto, WWF lamenta que en España solo se ha realizado un seguimiento pasivo, ya que se han hecho análisis una vez dada la voz de alarma en animales o trabajadores con síntomas compatibles con la COVID-19. Según la información de la que dispone la ONG, en Galicia, donde se concentra la mayoría de granjas, con 26 instalaciones, solo se ha realizado controles en cuatro de ellas.

Vigilancia proactiva en las granjas de visón

 

"En España se están infravalorando los riesgos de estas granjas para la salud y se pueden estar dejando sin detectar posibles brotes y mutaciones. El enfoque del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación es totalmente insuficiente. El tiempo nos ha dado la razón: llevamos meses pidiendo que el Gobierno ponga en marcha una vigilancia proactiva en las granjas de visón como se ha hecho en otros países", ha concluye la responsable del programa de especies de WWF España, Gema Rodríguez.