La llegada del verano y las elevadas temperaturas han dado inicio a una complicada temporada de incendios forestales. La abundancia de vegetación tras las copiosas lluvias del inicio de año pueden convertirse en una bomba de relojería de cara a un verano de altísimo riesgo, como ya se ha demostrado con incendios de gran consideración como el siniestro de la Segarra, en Lleida, donde dos personas fallecieron y más de 5.500 hectáreas fueron arrasadas.

 

Mapa de los incendios forestales

 

Mapa de los incendios forestales activos a 8 de julio de 2025 / Imagen: EA Mapa de los incendios forestales activos a 8 de julio de 2025 / Imagen: EA

Esta proliferación de siniestros se traslada al mapa de incendios activos a 8 de julio, donde aparece una gran concentración de fuegos en el cuadrante suroeste aunque, como ya ocurrió la semana pasada, el suceso de mayor gravedad afecta a Cataluña.

El mayor incendio activo de la Península en la actualidad es el fuego de Paüls, en la provincia de Tarragona, que ya ha arrasado más de 2.500 hectáreas y ha obligado a evacuar a cientos de personas. También hay otro siniestro de consideración en la provincia de Lleida, junto a la población de Pinell de Solsonès.

Además de este núcleo de concentración de siniestros, la mitad norte no ha sufrido una gran cantidad de sucesos de importancia; apenas un incendio en el centro de la provincia de Burgos, otro junto a la ría de Pontevedra y un último siniestro en las cercanías de Trabanca, al noroeste de la provincia de Salamanca.

Con el cuadrante suroeste libre de focos de importancia, a excepción de un siniestro en la sierra de Segura de la provincia de Jaén, la gran concentración de incendios activos se da en la zona suroeste peninsular. De norte a sur, encontramos tres siniestros en el cauce del Tajo, dos de ellos en el norte de la provincia de Toledo y otro en el norte de Cáceres.

Con dos siniestros más en la provincia de Ciudad Real y otro en el sur de la provincia de Badajoz, la última zona de gran concentración de siniestros se localiza en torno al cauce del Guadalquivir, con tres focos de relativa importancia bastante próximos entre sí.

 

Hectáreas quemadas por incendios forestales

 

Incendios forestales en España en datos hasta el 29 de junio de 2025 / Infografía: EA Incendios forestales en España en datos hasta el 29 de junio de 2025 / Infografía: EA

Más de 15.594 hectáreas se han quemado hasta el 29 de junio. Unas cifras que mejoraban con mucho las referencias anteriores, empiezan a acercarse peligrosamente a los números del año pasado tras los últimos incendios forestales de importancia. En esta misma fecha del año pasado ya habían ardido 21.982,61 hectáreas, unas 4.400 más que el dato actual. Estos números toman perspectiva si los comparamos con la media del último decenio, cuando durante los seis primeros meses del año han sido calcinadas unas 36.997 hectáreas de media, cifra que duplica el dato de este año. Este incremento del número de hectáreas siniestradas amenaza con empeorar en próximas semanas, ya que en esta estadística todavía no han llegado a incluirse los datos de incendios de gran consideración como el que causó dos víctimas mortales en la provincia de Lleida.

Este crecimiento durante los últimos días ha provocado que el número de siniestros acaecido durante 2025 haya superado el dato del año pasado. Hasta el 29 de junio se han producido 2.902 siniestros, de los cuales hay 1.936 conatos y 966 incendios que han afectado a más de una hectárea. Este balance supera ligeramente a los 2.856 siniestros ocurridos durante el mismo periodo del año pasado. Ambos números todavía son muy inferiores a los 4.587 siniestros padecidos de media durante el último decenio. El crecimiento también se ha traducido en una mayor presencia de grandes incendios forestales de una superficie mayor de 500 hectáreas. Hasta inicios de junio sólo se había producido un incendio de etas características, mientras que durante el último mes se han llegado a producir hasta cuatro siniestros de esta consideración.

El balance por regiones arroja importantes modificaciones. Aunque las Regiones del Noroeste siguen como las más afectadas, su proporción se ha reducido hasta el 49,33%, cuando en anteriores referencias suponía casi tres cuartas partes de la superficie total. Esta disminución se ha transferido en un aumento de proporción similar en las Comunidades interiores, que han duplicado su presencia hasta suponer un 36,51% de la zona forestal arrasada. La región mediterránea no ha sufrido grandes variaciones, con un 14,16% del total, mientras que las islas Canarias aún no han sufrido incendios de gran extensión.

Según el tipo de vegetación, un mes más el matorral y monte abierto es la superficie que ha sufrido mayores daños, con 12.062,43 hectáreas dañadas. En el último mes la superficie calcinada de pastos y dehesas ha sufrido un importante aumento y ha duplicado su dato hasta 4.693,19 hectáreas. A mucha distancia se mantiene la superficie arbolada, que ha sufrido el incendio de 838,72 hectáreas.