El prolongado descenso protagonizado por los embalses españoles durante todo el verano alcanza ya las catorce semanas consecutivas. La caída acontecida durante los últimos siete días llega a 1,5 puntos, lo que deja las reservas totales en un 59,3% de la capacidad, cifra más de dieciocho puntos inferior al máximo alcanzado en mayo.

 

Evolución del agua en los embalses españoles

 

Mapa de la situación de los embalses en España por cuencas hasta el 2 de septiembre de 2025 / Imagen: EA Mapa de la situación de los embalses en España por cuencas hasta el 2 de septiembre de 2025 / Imagen: EA

La bajada ha vuelto a ser generalizada en toda la Península, donde apenas dos ámbitos se han mantenido sin variación semanal, precisamente los mismos de la semana pasada: los pequeños ámbitos del Cantábrico Oriental y el País Vasco. Este descenso mayoritario ha supuesto una caída semanal de 825 hectómetros cúbicos que dejan las reservas actuales en 33.235 hectómetros.

La trayectoria de los embalses durante estos mismos días del año pasado fue casi calcada, con un descenso semanal similar, aunque las reservas eran bastante inferiores a las actuales, ya que en 2024 había alojado un 49,5% de la capacidad total, unos diez puntos menos que el dato presente. Esta tendencia podría variar la próxima semana, cuando se presupone la llegada de algunas precipitaciones que podrían adelantar el final del verano y la consecuente ausencia de lluvias.

 

La situación por cuencas hidrográficas

 

Situación de los embalses y evolución del agua embalsada en datos a 2 de septiembre de 2025 / Infografía: EA Situación de los embalses y evolución del agua embalsada en datos a 2 de septiembre de 2025 / Infografía: EA

Con la caída generalizada de las reservas, la práctica totalidad de la Península se mantiene por debajo de la cota del 70%, por encima de la cual apenas permanecen cinco ámbitos de escaso tamaño a excepción del Miño-Sil. Con la mayoría del territorio peninsular en la franja del 35-70%, la preocupación sigue centrada en el Segura, que ha vuelto a acelerar su caída hasta el 22,5%.

En el norte encontramos los dos únicos ámbitos que no han sufrido pérdidas durante la última semana, con el País Vasco congelado en el 85,7% y el Cantábrico Oriental en el 74,0%. Las caídas del resto de cuencas han sido de diversa consideración, con pérdidas de 1,7 puntos en Galicia Costa hasta caer por debajo del 50% (48,7%) y de menor entidad en el Miño-Sil (1,2 puntos para permanecer en el 73,9%) y el Cantábrico Occidental, que cae seis décimas y se queda en el 66,7%.

La trayectoria descendente de las dos grandes cuencas se prolonga otra semana más, de nuevo con mayor intensidad en el caso del Duero. La principal cuenca de la Meseta norte ha caído 2,3 puntos y baja hasta el 65,2%. En cambio, el descenso del Tajo es de menor entidad, 1,2 puntos, pese a lo cual permanece en el 68,6%.

En la región suroeste también se generalizan las pérdidas. Las de mayor entidad son las del Guadalquivir, que cae un punto y se queda en un 45,4%. Ligeramente inferiores son los porcentajes perdidos por la cuenca del Tinto, Odiel y Piedras, que queda en el 75,1%. Mientras, apenas han caído siete décimas el ámbito del Guadiana, que se queda en el 59,8%, y el del Guadalete-Barbate, que cae hasta el 44,5%.

La situación no es muy distinta en la vertiente mediterránea, donde hay pérdidas en todos los ámbitos, aunque dos hayan sido de especial repercusión. Por un lado, se encuentra la desmesurada caída del Júcar, que cae 4,3 puntos y desciende hasta el 51,5%. Por otro lado está la bajada del Segura, 1,8 puntos menos que la semana pasada, pero de especial gravedad por la complicada situación que protagoniza este ámbito que tan solo alberga un 22,5% de su capacidad potencial. También perdió 1,8 puntos la cuenca del Ebro, la de mayor capacidad de la zona, que ahora se queda en un 60,1%. De menor entidad han sido las bajadas del ámbito de Cataluña (1,4 puntos menos y un 72,5%) y la Cuenca Mediterránea Andaluza, que cayó nueve décimas y permanece en el 48,6% del total.