Ecologistas en Acción ha exigido que se deje de usar alimentos para fabricar biocombustible a pesar de que se han promovido como una de las medidas para reducir las emisiones de la quema de combustibles fósiles porque también contribuyen al agravamiento de la crisis climática y de la pérdida de la biodiversidad.

Italia, Países Bajos y España elaboraron el 8,5% de aceite de palma de la producción europea, según Ecologistas, y de todos ellos España es el mayor elaborador.

Además, subrayan que las refinerías españolas de biocombustible transformaron en 2019 1,76 megatoneladas (mt) de aceite de palma en biodiesel. Por este motivo, añaden que se desarrolló la nueva Directiva Europea de Energías Renovables (DER II) que, aunque no establece una manera clara acerca de eliminar los biocombustibles basados en cultivos alimentarios, sí ofrece posibilidades para que lo hagan los estados miembros.

Así, solo el biodiesel de aceite de palma se considera, según Ecologistas, como insostenible o de alto riesgo debido a la deforestación que lleva asociado su cultivo en la nueva directiva. Esto significa que el volumen de aceite de palma se congela a partir de 2019 y después en 2023 de reducirá progresivamente hasta el 0% en 2030. Sin embargo, una parte de este aceite se podría escapar de la eliminación al catalogarse como de bajo riesgo.

España es el mayor elaborador

 

En este sentido, el grupo ecologista destaca que empresas españoles, y mencionan a Repsol, apuestan en su estrategia de biocombustibles avanzados de bajas emisiones por el hidrobiodiésel o aceites vegetales hidrotratados (HVO por sus siglas en inglés) aunque esta materia en España no es sostenible porque, de acuerdo con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el 98% de HVO se sintetiza a partir de aceite de palma.

Por ello, Ecologistas en Acción y la Federación Europea Transport & Environment demandan excluir todas las materias primas insostenibles de la denominación biocombustibles avanzados, tanto el HVO, como los ácidos grasos destilados de palma (PFAD por sus siglas en inglés).

Según los informe de Transport and Environment y Cerology, el PFAD es un coproducto de la industria del aceite de palma que no debe catalogarse como biocombustible avanzados, ya que se utiliza en otras industrias como la de la alimentación para animales, la oleoquímica y la cosmética.

Ecologistas advierte de que si se sigue aumentando su uso para biocombustibles, se producirá un efecto de desplazamiento en estas industrias y se necesitarán otras materias primas vírgenes para reemplazarlo, como ya sucedió con el aceite de palma para biocombustibles de primera generación.

Por último, Ecologistas en Acción ha lanzado un vídeo de animación dentro de su campaña #NoEnMiDepósito para instar al gobierno a tomar medidas en la transposición de la DER II para eliminar materias primas ligadas a la deforestación y violación de derechos humanos como el aceite de palma y soja.