El pleno del Parlamento Europeo ha respaldado este jueves retrasar la aplicación de las nuevas normas de clasificación, etiquetado y envasado de productos químicos del 1 de julio de 2026 al 1 de enero de 2028 para reducir los costes de cumplimiento y la carga administrativa de la industria química.

Los eurodiputados han apoyado la propuesta de simplificación Ómnibus VI que la Comisión presentó el pasado julio con 441 votos a favor, 108 en contra y 11 abstenciones. Para entrar en vigor, la regulación requiere ahora la aprobación formal del Consejo, que aprobó el mismo texto el pasado 24 de septiembre.

El paquete también simplifica las normas de etiquetado de sustancias químicas peligrosas, aclara la normativa europea sobre cosméticos y agiliza el registro de fertilizantes de la UE, unas medidas que, según cálculos de la Comisión, supondrán un ahorro para la industria de al menos 363 millones de euros al año.

Asimismo, modifica los plazos para el reetiquetado y los requisitos obligatorios de formato, y las normas sobre publicidad, ventas a distancia y etiquetado en los surtidores de combustible.