Esta semana ha acontecido el noveno descenso consecutivo de los embalses españoles, que prolongan de nuevo la sostenida caída que protagonizan desde finales de mayo. Durante los últimos siete días han vuelto a perder 1,4 puntos hasta situarse en un 67%. Estas pérdidas suponen que, durante los dos últimos meses, las reservas de agua hayan disminuido más de diez puntos con respecto al máximo de 77,5% de finales de mayo.

 

Evolución del agua en los embalses españoles

 

Mapa de la situación de los embalses en España por cuencas hasta el 29 de julio de 2025 / Imagen: EA Mapa de la situación de los embalses en España por cuencas hasta el 29 de julio de 2025 / Imagen: EA

Esta caída masiva se ha repartido por todos los ámbitos de la Península, con las únicas excepciones de Cataluña, que se ha mantenido invariable, y el ámbito del Segura, que ha logrado recuperar una décima en los últimos días. Con todo, las pérdidas semanales totales ascienden a 767 hectómetros cúbicos, cifra muy similar al descenso experimentado durante la semana pasada.

Esta progresiva caída sitúa las reservas disponibles en la actualidad en 37.544 hectómetros cúbicos. En la comparación anual, el descenso semanal ha resultado algo más atenuado que en la misma semana de 2024, donde las reservas cayeron 1,6 puntos hasta situarse en el 57,2% del total, prácticamente diez puntos menos que el agua embalsada en la actualidad que, como en anteriores veranos, seguirá con su prolongado descenso propio de cada mes de agosto.

 

La situación por cuencas hidrográficas

 

Situación de los embalses y evolución del agua embalsada en datos a 29 de julio de 2025 / Infografía: EA Situación de los embalses y evolución del agua embalsada en datos a 29 de julio de 2025 / Infografía: EA

La gran mayoría de los ámbitos de la Península prolongaron las caídas que padecen durante todo el verano con dos únicas salvedades: el mínimo ascenso del Segura y la estabilidad del ámbito de Cataluña. A pesar de esta progresiva bajada, todavía la mayoría de la mitad norte de la Península está por encima del 70% de su capacidad. El resto del territorio se encuentra en torno a la cota del 50% con la salvedad del Segura que, a pesar de su ligero ascenso, no logra superar el 28,8% del total.

En la costa norte los descensos han afectado a todas las cuencas de la zona. La mayor bajada porcentual ha afectado a la región del País Vasco, que se ha dejado 4,8 puntos para bajar hasta el 85,7%. A continuación está el descenso del Cantábrico Occidental, con 2,4 puntos menos y un 73,9% de llenado. De menor entidad son las pérdidas del Cantábrico Oriental (1,4 puntos y un 78,1%) y Galicia Costa (1,1 puntos y un 59,9%). La menor caída de la zona es la del Miño-Sil, precisamente la cuenca con mayor capacidad del norte de la Península, que ha visto caer sus reservas ocho décimas para quedarse con el 80,3% de su capacidad.

Las dos grandes cuencas de la Meseta prolongan la tendencia que han mostrado durante el último mes. De nuevo la caída del Duero es de mayor intensidad, con una bajada de dos nuevos puntos hasta el 77,3%, mientras que el Tajo aminora ligeramente esas pérdidas hasta las nueve décimas y el 75,2% de su capacidad total. El Guadiana iguala la caída porcentual semanal de la cuenca del Tajo y se queda con un 64,7%.

En el suroeste las caídas son de similar proporción, donde todos los ámbitos asumen pérdidas en torno a las siete u ocho décimas semanales. Con este descenso generalizado, el ámbito del Tinto, Odiel y Piedras se queda en un 81,7%, el Guadalquivir en un 51,1% y el Guadalete-Barbate cae hasta un 48,4%, ya estabilizado por debajo de la barrera de la mitad de sus reservas.

La vertiente mediterránea vuelve a tener un comportamiento bipolar entre sus distintos ámbitos. Por un lado, está el Ebro, con una abrupta caída semanal, y por otro, el resto de cuencas, con caídas semanales mucho más limitadas y, en algunos casos, inexistentes. De hecho, la mayor cuenca de la vertiente mediterránea protagoniza una caída de 3,1 puntos, lo que se traduce en una pérdida de 241 hectómetros cúbicos hasta quedarse en un 74,4% de su capacidad.

En el resto de ámbitos las pérdidas son menores, de un punto en el Júcar, que permanece en el 56,9%, y de siete décimas en la cuenca Mediterránea Andaluza, con un 52,5%. En esta zona se encuentran las dos únicas cuencas que no han caído durante la última semana. Cataluña permanece invariable en un 77,5% y el Segura protagoniza el único ascenso semanal, apenas de una décima hasta el 28,8%, pero al menos evita nuevas bajadas que compliquen más una situación ya de por sí bastante difícil.