La Defensora de la Ciudadanía de Palma, Anna Moilanen, ha manifestado su preocupación por la promoción de corridas de toros dirigida a menores de edad.

 

Proteger a los menores de cualquier forma de violencia

 

En una respuesta a una queja formulada por la Fundación Franz Weber, la defensora sostiene que comparte "plenamente" la preocupación sobre la necesidad de proteger a los menores de cualquier forma de violencia.

"Coincido en que la promoción de estos eventos mediante descuentos, u otras iniciativas publicitarias dirigidas a personas menores, pueden favorecer su asistencia a las corridas y su exposición a los efectos de este tipo de espectáculos contrarios a sus derechos y bienestar", señala en la carta de respuesta, hecha pública por la fundación.

 

Ofertas dirigidas a menores de edad

 

La queja, formulada a principios de julio, se centraba en las ofertas dirigidas a personas menores de edad para acceder a una corrida de toros prevista para el próximo 7 de agosto en el municipio.

Anima a la Fundación Franz Weber a trasladar sus quejas y solicitudes a la Conselleria de Presidencia y a la Oficina Balear de Infancia y Adolescencia (OBIA)

Asimismo, Moilanen indica que la regulación y el control de las actividades taurinas no forman parte de sus competencias, sino que corresponden al Govern balear. Por ello, anima a la Fundación Franz Weber a trasladar sus quejas y solicitudes a la Conselleria de Presidencia y a la Oficina Balear de Infancia y Adolescencia (OBIA).

Por parte de la fundación, han valorado "muy positivamente" la contestación subrayando que "existe un consenso social y científico" al respecto de este tipo de prácticas empresariales, tanto en Palma como en Inca, donde se intenta fomentar la entrada de menores "para presenciar violencia sobre animales y personas".

Prácticas empresariales donde se intenta fomentar la entrada de menores "para presenciar violencia sobre animales y personas"

Igualmente, ha sumado sus críticas al Ayuntamiento de Palma, una ciudad declarada como Amiga de la Infancia, que, a su parecer, no está haciendo valer dicho reconocimiento "al permitir, como poco no respondiendo, que menores de edad contemplen sangre, crueldad y maltrato en vivo y en directo, sumando a ello un horario intempestivo según la franja de edad".