La venta de productos fabricados con marfil ha disminuido en China casi a la mitad hasta un 26 por ciento en comparación con 2017, año en el que se prohibió su comercio en el país asiático, según una nueva investigación de WWF y su iniciativa Traffic, que se ha publicado en el marco de la campaña STOP Tráfico de la organización, que cuenta con más de 73.000 firmas.

Concretamente, en el momento en el que se anunció la prohibición, el porcentaje disminuyó hasta el 14 por ciento. Así, el estudio sobre los consumidores, llevado a cabo en colaboración con GlobeScan, una consultora independiente, ha mostrado que el número de encuestados que afirmaba haber comprado marfil en el pasado había descendido "sustancialmente".

Asimismo, WWF apunta que el apoyo al veto del comercio de marfil ha sido también "muy elevada", con 9 de cada 10 encuestados que confirmaron su apoyo al veto.

Sin embargo, la organización indica que continúan otros problemas, como la existencia de ciertas zonas y puntos calientes de tráfico de marfil, sobre todo en la frontera con Vietnam, o el aumento de las subastas desde 2017, que continúa siendo la única manera legítima de comercial con antigüedades de marfil fabricadas con anterioridad a la prohibición. Otro asunto de preocupación para la organización es el bajo nivel de conocimiento de los encuestados sobre la prohibición de marfil: solo el ocho por ciento de las personas encuestadas tenían conocimiento del veto.

A pesar de los efectos positivos, las excepciones que permiten la venta de antigüedades de marfil en subastas revelan posibles vacíos legales que pueden permitir el blanqueo de marfil ilegal. La visita a 17 exhibiciones de objetos para subastas en 2018 mostró el incumplimiento de la obligación de contar con la aprobación administrativa de las autoridades.

Del total de las exhibiciones visitadas, siete de ellas aparentemente violaban las leyes y las regulaciones de las subastas de marfil de elefante. Como consecuencia, las autoridades se incautaron de 219 lotes con productos fabricados con marfil, con un valor estimado de entre 827.000 y 919.000 euros. Durante la encuesta, Traffic también descubrió que en algunas subastas se etiquetaba deliberadamente de forma errónea los productos de marfil para evitar su supervisión.

Más de 2.800 productos

Además, Traffic visitó 157 mercados de 23 ciudades y encontró más de 2.800 productos fabricados con marfil en 2018. Comparado con 2017, el número de tiendas con estos productos ha descendido un 30 por ciento. Sin embargo, resulta llamativo para la ONG que el número de objetos de marfil encontrados en ciudades medianas y pequeñas representa más de la mitad (el 56 por ciento) de los productos de todas las ciudades.

"Estamos viendo tendencias positivas tras la prohibición del marfil en China que indican que el cambio en la legislación puede estar teniendo muy buenos resultados. Pero la demanda persiste y la falta de concienciación entre los consumidores de algunas partes del país, así como la existencia de zonas con regulación y medidas insuficientes, hacen necesario redoblar los esfuerzos", explica el responsable del programa de especies de WWF España, Luis Suárez.