El Instituto Internacional de Derecho y Medio Ambiente (IDDMA) ha reclamado a los europarlamentarios españoles miembros del Comité de Industria del Parlamento Europeo que pongan fin a las ayudas al carbón.

Así, con motivo del debate en curso sobre el diseño del futuro mercado energético de la UE y en concreto, sobre el Reglamento del Mercado Interno de la Electricidad que se está negociando, los abogados ambientales han formulado un conjunto de recomendaciones a los representantes españoles en la Eurocámara.

En concreto, han subrayado la importancia clave de regular los Mecanismos de capacidad para evitar el alargamiento de la vida de las centrales de carbón de manera artificial, y los mecanismos de Acceso y despacho preferentes, para promover una transición energética a renovables. El carbón, según recuerdan, es la fuente de energía más contaminante y además impacta de forma negativa sobre la salud y el medio ambiente.

Así, recomienda proteger este el mecanismo para que las instalaciones que usen energías renovables para promover las energías limpias hasta llegar a un escenario de igualdad de condiciones, como base para una transición energética baja en carbono.

La organización considera fundamental tener en cuenta las externalidades de los diferentes tipos de energía, como los impactos en salud y medio ambiente, que forman parte de los costes y deberían tener impacto en la evaluación económica.

Uno de los principales responsables del cambio climático

En cuanto a las evaluaciones de adecuación de recursos y mecanismos de capacidad, estiman que estos mecanismos deben ser reducidos al máximo y controlados con una Evaluación de Adecuación de Recursos que certifique su necesidad real y un plan para su abandono posterior.

De este modo, aseguran que las centrales con emisiones intensas de carbono, bajo criterios estrictos de límites de las emisiones de CO2 de 550g CO2/kWh, "no deberían recibir subvenciones que alarguen su vida de forma artificial".

La directora del IIDMA, Ana Barreira, ha señalado que este tipo de mecanismos, mal entendidos, permiten que se alargue de forma artificial el uso del carbón a pesar de ser el combustible más contaminante y uno de los principales responsables del cambio climático.

"No se debe permitir el uso de la legislación para proteger y subvencionar centrales térmicas que están abocadas al cierre en el contexto actual. Es necesario trabajar en un plan ordenado de abandono del carbón y cierre de las centrales térmicas si queremos cumplir con los objetivos del Acuerdo de París y evitar los efectos más duros del cambio climático", ha insistido.