Más de 1.000 investigadoras y académicas de toda España han firmado el manifiesto para apoyar la huelga feminista de este jueves, 8 de marzo, en el que reivindican igualdad de oportunidades en el ámbito universitario y docente.

"Las mujeres que trabajamos en la universidad como profesoras e investigadoras somos muchas, como muchas son las mujeres estudiantes y nuestras compañeras trabajadoras de la administración de servicios", indica el manifiesto, escrito en castellano, catalán y gallego.

No obstante, reconocen que hay "feminización" en las universidades que "está haciendo resquebrajarse algunos de los pilares patriarcales que han sostenido la universidad desde su fundación". "Estamos no solamente mejorando la calidad de la investigación y la docencia, sino además poniendo la relación educativa en el centro de nuestro trabajo para que el cuidado de las personas, de los espacios o de los textos que estudiamos y escribimos sea un valor vital y mejore la convivencia universitaria", defienden.

Pese a esa "feminización", las investigadoras –bajo el lema #LasAcadémicasParamos– apoyan la huelga de este jueves por varios motivos. En primer lugar, porque, según afirman, las mujeres reciben salarios más bajos y su carrera académica está "más llena de obstáculos" que la de sus compañeros.

Además, apoyan la huelga debido a que "los sesgos implícitos de género discriminan a las mujeres en la percepción de méritos en los procesos de evaluación, acreditación, selección y promoción, en la revisión y aceptación de artículos, en la evaluación de proyectos de investigación e incluso en el volumen de citas recibidas" por sus trabajos académicos.

También critican que, a pesar de ser "mayoría" entre las personas graduadas, las mujeres suponen una "minoría" entre las personas que ocupan puestos de mayor remuneración y prestigio, entre las personas galardonadas con premios y distinciones o entre las personas invitadas a impartir conferencias. Según apunta el manifiesto, sólo hay un 21% de mujeres catedráticas en España y tres rectoras entre las universidades públicas españolas.

Por el contrario, subrayan que las mujeres sí son "mayoría" entre quienes tienen contratos laborales precarios y, en especial, contratos de asociadas. "Queremos equidad de género en la promoción profesional y exigimos la paridad en todos los órganos de decisión, evaluación y selección de personal", piden.

Las investigadoras también reivindican en el manifiesto una "dimensión de género" que se integre de manera transversal en la investigación, pues consideran que los proyectos dirigidos por mujeres tienen menos posibilidades de ser financiados. Además, según denuncian, las investigaciones sobre género y sexualidad "siguen siendo tratadas como estudios secundarios en todas las disciplinas".

"Cultura universitaria libre de acoso sexual"

Igualmente, exigen una docencia "socialmente relevante y al servicio de la transformación social, que tenga en cuenta las experiencias y necesidades de hombres y mujeres y que reconozca las contribuciones realizadas por las mujeres", por lo que piden que la perspectiva de género se integre en los programas de las asignaturas y en las metodologías docentes de todos los programas de grado y postgrado.

Las académicas también secundan la huelga porque reclaman la puesta en práctica en la actividad docente, investigadora y de gestión, de medidas de conciliación de la vida y el trabajo contenidas en la negociación colectiva, así como que se promueva la corresponsabilidad entre mujeres y hombres en los cuidados.

Asimismo, quieren que las unidades de igualdad de las universidades sean una "unidad especializada dotada de los recursos humanos y económicos suficientes" y que estén dirigidas por "mujeres expertas en políticas de igualdad a quienes se reconozca adecuadamente la gestión que supone el cargo". "Queremos reconocimiento y recursos suficientes para los institutos y seminarios de investigación feminista, de género y de las mujeres", piden también, al tiempo que exigen que los planes de igualdad tengan "una implementación efectiva".

Por otro lado, reclaman "una cultura universitaria libre de acoso sexual" que no sea "sexista, LGBTIfóbico, racista, capacitista y clasista", y donde se respeten sus "cuerpos" y sus "ideas". En este sentido, quieren "la aplicación efectiva de los procedimientos de investigación y sanción de los protocolos contra estas violencias y la asignación de un mayor volumen de recursos a las actividades de sensibilización y prevención de las violencias", dice el manifiesto.

Por último, las investigadoras piden una "igualdad en valor de mujeres y hombres en intersección con otras desigualdades" que sea "realmente un horizonte civilizatorio y transformador de la universidad". "¡Seguiremos hasta conseguir la universidad –el mundo– que queremos!", concluye el manifiesto.

La presidenta del CSIC irá a trabajar el día de la huelga

La presidenta del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Rosa Menéndez, primera mujer que ocupa este cargo en la historia de la institución, se ha solidarizado con la huelga feminista convocada este jueves, 8 de marzo, pero ha afirmado que irá a trabajar porque la repercusión que tendría cancelar su agenda sería "muy grande".

"Yo, a título personal, voy a trabajar, tengo compromisos previos que creo que la repercusión sería muy grande y tengo programada una serie de actividades y viajes que no puedo cancelar", ha señalado. Si bien, ha manifestado su solidaridad con la huelga feminista. "Me solidarizo con todas las mujeres que están luchando o reivindicando", apunta.

En todo caso, ha precisado que el CSIC no tiene "un posicionamiento institucional" con respecto a la huelga, pero que "se respeta y comprende" este "derecho de las personas".

A la presidenta del CSIC le parece "una buena idea" que se hagan parones laborales este jueves porque considera "necesario hacer fuerza" para "apoyar y defender la igualdad de oportunidades para la mujer y la igualdad profesional en todos los aspectos", así como "hacer visibles a las mujeres".

"Somos conscientes de que es necesario dar mayor visibilidad a las mujeres en todos los ámbitos, y aunque no nos afecte tan directamente como en otros gremios, estamentos o instituciones, somos todas, las mujeres, las profesionales en general y, en este caso, las científicas", ha comentado.