Las aguas de la comarca barcelonesa del Garraf, a unos cuarenta kilómetros de la capital catalana, son en primavera una zona de alimentación para el rorcual común, el segundo mayor animal del planeta. Hasta ahora se pensaba que estos cetáceos solamente atravesaban el litoral mediterráneo peninsular durante su migración camino de otras zonas de alimentación, y ni tan siquiera se había documentado la presencia de ballenas en el Garraf. Lo ha podido descubrir la asociación EDMAKTUB tras las cuatro primeras campañas completas de seguimiento y recogida de datos de su Proyecto Rorcual.

Y existen indicios de que esta circunstancia sería extrapolable al mar Balear, que sería también una zona de alimentación y no un simple corredor migratorio como se venía afirmando hasta ahora, asegura esta entidad científica dedicada al estudio de los mamíferos marinos. 

Las pruebas que han permitido al equipo científico de la asociación llegar a estas conclusiones son, por una parte, imágenes aéreas de distintos individuos alimentándose en superficie que obtenidas mediante un dron en distintos días y distintas temporadas, y también de ballenas que emergían a superficie con la papada hinchada, lo cual indica que subían a respirar tras haberse alimentado a mayor profundidad.

También la observación de patrones relacionados con la alimentación, como el movimiento en círculos por largo tiempo en una misma zona o los tiempos de respiración entre inmersiones propios de las ballenas que están buscando alimento o alimentándose. La defecación es otro indicador de que los animales se están alimentando y no sólo se han podido observar heces en el agua, sino también registrar en imágenes aéreas el momento de la defecación de algunos ejemplares.

Otro indicio que apuntaba a que la presencia de los animales obedecía a que la zona les proporciona abundante alimento es la permanencia de un mismo individuo por varios días (e incluso varias semanas). El rorcual común es un animal migratorio, y el hecho de que permanezca en la misma zona por varios días indica que se está alimentando o que está buscando alimento.

También confirma este extremo la fidelidad de determinados individuos a la costa del Garraf, que la visitan durante distintas temporadas. De los 132 individuos catalogados desde 2011, más de un 10% han sido reavistados en la zona de estudio en distintos años. Y diversos avistamientos en el estrecho de Gibraltar en los que se han registrado salidas de ballenas hacia el Atlántico desde el mes de junio demostrarían que estos individuos no se quedan durante el verano para alimentarse en el mar de Liguria como se pensaba hasta ahora.

Abundancia de krill

La presencia de krill en aguas superficiales y cerca de la plataforma costera, que los investigadores han recogido en abundancia en las mismas zonas de observación de las ballenas, refuerza la hipótesis de que acuden a alimentarse a la costa barcelonesa. El krill es el principal alimento del rorcual común.

El Proyecto Rorcual es una investigación pionera, por ser la primera que se lleva a cabo en la zona y por incorporar técnicas de investigación novedosas como el uso de drones para la captación de imágenes y recogida de muestras. La investigación se centra en el estudio de las ballenas y de las condiciones oceanográficas y ambientales que hacen posible su presencia cada primavera en aguas catalanas, un hecho que hasta ahora era poco (o nada) conocido por la comunidad científica.

Pudiendo alcanzar hasta los 24 metros de longitud, el rorcual común es la ballena de mayor tamaño que transita regularmente el Mediterráneo. También llamada ballena de aleta, es una especie en peligro de extinción que habita las zonas pelágicas –es decir, en mar abierto pero a poca profundidad– y de forma esporádica, también las zonas costeras de las aguas templadas o frías. En este sentido, su distribución geográfica es global, y en nuestras longitudes comprende los océanos Ártico y Atlántico y el mar Mediterráneo.

La Asociación EDMAKTUB es una organización sin ánimo de lucro fundada en el año 2000 por el especialista en cetáceos Eduard Degollada. Tiene sede en Barcelona y se dedica al estudio científico y a la divulgación del medio acuático, especialmente a la investigación de los cetáceos. Dispone para ello de una completa plataforma cuyo eje central es un barco de investigación equipado con multicóptero teledirigido, hidrófono y diverso instrumental para la recogida de muestras e imágenes. El equipo humano lo componen un grupo de científicos especialistas en distintos ámbitos: biología, veterinaria, ciencias ambientales y técnicas audiovisuales.