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Una clínica para la vida marina

En sus dos décadas de existencia, el CRAM ha logrado atender con éxito a cientos de cetáceos y tortugas. Es sin duda uno de los centros de referencia de su género a nivel internacional.

  • Huesos de una tortuga laúd en la sala de necropsias / Foto: Josep Cano
  • La pértiga diseñada por el CRAM permite a los pescadores liberar a las tortugas enganchadas a los anzuelos del palangre / Foto: Josep Cano
  • La piscina destinada a las tortugas tiene una capacidad de 580.000 litros de agua / Foto: Josep Cano
  • El veterinario Fernando Alegre revisa el estado general del ejemplar / Foto: Josep Cano
  • Una tortuga boba sometida a unas pruebas clínicas ante un grupo de estudiantes de veterinaria / Foto: Josep Cano
  • 'Cuatro por cuatro', una tortuga boba de 95 kilos, ya no puede ser liberada porque pasó 25 años recluída en una bañera / Foto: Josep Cano
  • Una tortuga recuperada en el centro en el momento de recuperar la libertad / Foto: Fernando Alegre / CRAM
  • Veterinarios del CRAM atendiendo a un delfín varado en la playa de Cunit (Tarragona) / Foto: Fernando Alegre / CRAM