La Generalitat de Cataluña comenzará a aplicar en 2020 el nuevo impuesto de CO2 a vehículos, informó la Conselleria de Territorio y Sostenibilidad en un comunicado, que señala que ya estaba recogido en la Ley catalana del cambio climático, aprobada en 2017.

Un total de 3,6 millones de vehículos deberán pagar el tributo, que queda recogido en un anteproyecto de ley de la Conselleria de Vicepresidencia y Economía y Hacienda que será aprobado en breve por el Govern, las motocicletas se incorporarán en 2020 y lo pagarán en 2021 y los camiones no tributarán aunque el Govern no descarta que lo hagan en un futuro, ha publicado este viernes 'La Vanguardia'.

El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, defendió en una visita en Guissona (Lleida) el sábado el nuevo impuesto como una herramienta esencial para poder hacer mejores políticas ambientales ante la emergencia climática.

El conseller destacó que Cataluña "es pionera en fiscalidad ambiental finalista para actuar en beneficio de la salud de las personas, del país y del planeta", y ha recordado que ya se aplicó este sistema con el canon del agua y de residuos.

Calvet explicó que el impuesto se meritará este 2019, los recibos tendrán fecha de 31 de diciembre, pero que se comenzará a pagar en 2020, y se destinará a nutrir dos grandes fondos económicos: el fondo contra el cambio climático y el de medio natural y biodiversidad.

En el primer caso, se harán actuaciones de mitigación y adaptación, para la mejora del transporte público y ayudas a la ambientalización de flotas y para modernizar los vehículos; y con el segundo, se ayudará a gestionar mejor los espacios naturales protegidos de Cataluña y a luchar contra la pérdida de biodiversidad.

Quien más contamina más paga

El impuesto se aplicará sobre la tenencia de vehículos en función de las emisiones y, estos, se gravaran a partir de la emisión de 95 gramos de CO2 a la atmósfera, con cinco tramos diferenciados, siguiendo la máxima de "quien más contamina más paga".

El conseller garantizó que el impuesto se implantará de forma progresiva, y el primer año, 2020, los vehículos que emiten entre 95 y 120 gramos quedarán exentos para que la adaptación sea gradual: "El segundo año ya pagarán, pero podremos poner al alcance de la población ayudas a la ambientalización de vehículos con lo que dispondremos de los ingresos del primer año", ha dicho.

Calvet defendió que esta iniciativa demuestra el "compromiso absoluto" del Govern con la lucha contra el cambio climático, y argumentó que son necesarias flotas más eficientes y que todos los vehículos que se mueven en Catalunya generen menos emisiones o sean de emisiones cero, así como disponer de más transporte público.

En este contexto, destacó la nueva línea de tren desde el centro de Barcelona al aeropuerto de El Prat gestionada por Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC), una actuación que va "en la línea correcta para descarbonizar el país".